La mayoría de los refugiados que se vieron obligados a volver a sus hogares, saqueaban las tiendas en la frontera de Kokang, en donde el Ejercito Birmano luchó la semana pasada contra las milicias armadas.
Más de dos tercios de los refugiados que habían llegado hasta la ciudad fronteriza china de Nansan se habían ido el martes. El resto recogían sus cosas y conversaban mientras filas de tiendas de campaña azules eran desmontadas. El lunes varios autobuses habían trasladado a muchos de ellos a la frontera.
China nunca declaró oficialmente refugiados a los ciudadanos birmanos y chinos que huyeron de Kokang, pero les dio alimentos, agua y alojamiento temporal a 37.000 personas.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Jiang Yum, reiteró su llamada a la Junta Militar Birmana para que restaure la estabilidad y proteja a los ciudadanos chinos, pero no preciso cuanto tiempo se permitirá a los refugiados que permanezcan en el país.
"Mantener la estabilidad de la zona, es de interés y responsabilidad mutua", dijo la portavoz durante una rueda de prensa en Pekín. El portavoz del Departamento del Estado de EEUU, Ian Kelly, dijo que Washinton está muy preocupado por los disturbios.
"Instamos a las autoridades birmanas a que detengan su campaña militar y desarrollen un diálogo genuino con grupos étnicos minoritarios así como también con la oposición democrática birmana"- dijo.
El enfrentamiento estalló cuando Birmania desplegó tropas para desarmar a insurgentes étnicos. Analistas indican que el objetivo es neutralizar la amenaza de milicias frente a las futuras elecciones del 2010, que serán las primeras que la Junta Militar gobernante realice en las dos ultimas décadas.
Más de dos tercios de los refugiados que habían llegado hasta la ciudad fronteriza china de Nansan se habían ido el martes. El resto recogían sus cosas y conversaban mientras filas de tiendas de campaña azules eran desmontadas. El lunes varios autobuses habían trasladado a muchos de ellos a la frontera.
China nunca declaró oficialmente refugiados a los ciudadanos birmanos y chinos que huyeron de Kokang, pero les dio alimentos, agua y alojamiento temporal a 37.000 personas.
El portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores chino, Jiang Yum, reiteró su llamada a la Junta Militar Birmana para que restaure la estabilidad y proteja a los ciudadanos chinos, pero no preciso cuanto tiempo se permitirá a los refugiados que permanezcan en el país.
"Mantener la estabilidad de la zona, es de interés y responsabilidad mutua", dijo la portavoz durante una rueda de prensa en Pekín. El portavoz del Departamento del Estado de EEUU, Ian Kelly, dijo que Washinton está muy preocupado por los disturbios.
"Instamos a las autoridades birmanas a que detengan su campaña militar y desarrollen un diálogo genuino con grupos étnicos minoritarios así como también con la oposición democrática birmana"- dijo.
El enfrentamiento estalló cuando Birmania desplegó tropas para desarmar a insurgentes étnicos. Analistas indican que el objetivo es neutralizar la amenaza de milicias frente a las futuras elecciones del 2010, que serán las primeras que la Junta Militar gobernante realice en las dos ultimas décadas.
Visto en Birmania por la paz.
0 comentarios:
Publicar un comentario