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La elecciones en Myanmar podrían generar aumento de refugiados

lunes, 11 de enero de 2010

La basura tirada en las afueras de la ciudad tailandesa de Mae Sot, que se pudre junto a pescado rancio y otros desechos, representa un miserable paraíso para cientos de refugiados provenientes de Myanmar, que según grupos de ayuda podrían aumentar este año.

Agrupaciones de ayuda se están preparando para un incremento de refugiados en Tailandia y China provenientes de Myanmar, de cara a las primeras elecciones parlamentarias en dos décadas que realizará el país este año, lo que podría tensar los vínculos con Estados vecinos y empeorar la situación en los campos de refugiados tailandeses.

Algunas de las personas que huyeron a Tailandia están viviendo en condiciones extremas. Alrededor de 300 inmigrantes que ingresaron al país de forma ilegal permanecen refugiados en un asentamiento emplazado junto a montañas de basura en las afueras de Mae Sot, a unos cinco kilómetros de la frontera.

Sin embargo, aseguran que vivir en medio de la basura es mejor que lo que tenían en casa. Algunas minorías étnicas han enfrentado una campaña del Gobierno militar de Myanmar, marcada por asesinatos, trabajo forzado, violaciones y ataques a sus pueblos.

Quiero quedarme aquí y ahorrar algo de dinero porque puedo quedarme con lo que gano y nadie me acosa, incluso si el trabajo es duro y sucio”, comentó Sen Sen, una mujer de 38 años, perteneciente a la etnia Karen.

Las personas huyen de casuchas improvisadas y se alinean cuidadosamente cada vez que llegan los camiones de la basura, esperando el momento en el que pueden cavar entre los desechos para buscar bienes que puedan ser reciclados.

Niños y niñas con pies descalzos registran montones de desperdicios y a menudo se distraen ante la vista de juguetes rotos y muñecas cubiertas de barro.

Sen Sen gana cerca de 100 baht (3 dólares) al día por vender plástico y dice que le alcanza para vivir. En Myanmar tenía que entregar casi todo el dinero que ganaba a oficiales militares que lo recaudaban como impuestos y “dinero de protección”.

Persecucion
La junta militar de Myanmar ha sido acusada por largo tiempo de perseguir a las minorías étnicas del país, provocando un continuo éxodo.

Cerca de 140.000 refugiados viven en campos oficiales que han sido establecidos junto a la frontera de Myanmar y Tailandia, de acuerdo a una agencia de refugiados de la ONU.

Aproximadamente 37.000 personas huyeron a China en agosto después de que las fuerzas de seguridad vencieran a combatientes leales al grupo étnicamente chino Kokang, lo que provocó un extraño reproche hacia los generales de Myanmar de parte de China, crucial aliado e inversionista.

Miles huyeron a Tailandia en junio cuando el Ejército se enfrentó con la Unión Nacional Karen (UNK), grupo rebelde que durante los últimos 60 años ha estado buscando independencia en las montañas del este que limitan con Tailandia.

Trabajadores sociales indican que el número de refugiados de la ex Birmania ha disminuido durante los últimos meses, pero la situación es delicada, mientras continúa un enfrentamiento de baja intensidad entre rebeldes UNK y el Ejército Democrático Budista Karen (EDBK), alineado con el Ejército.

El enfrentamiento, comentan, sugiere poco progreso en la resolución de una de las insurgencias de más largo aliento a nivel mundial, posibilitando mayor inestabilidad y flujo de refugiados.

También destaca la fragilidad de los acuerdos de cese al fuego del Gobierno con más de una decena de grupos étnicos armados.

Hasta ahora hay enfrentamientos todas las semanas”, dijo David Eubank, trabajador de asistencia en el norteño estado de Karen en Myanmar y director de Free Burma Rangers, grupo cristiano que ayuda a los refugiados dentro de Myanmar.

El comentó que aún no hay ofensivas a gran escala, pero que el Ejército de Myanmar estaba re suministrando sus campos.

Aung Din, director ejecutivo de U.S. Campaign for Burma, grupo exiliado que está en cercano contacto con líderes tribales de Myanmar, dijo que las fuerzas leales al Gobierno también estaban aumentando sus suministros tras mortales enfrentamientos el mes pasado.

Las tropas del régimen en el estado de Karen están reuniendo comida y otros suministros”, precisó.

De acuerdo a sus fuentes, las tropas UNK tendieron una emboscada a un batallón del régimen el 16 de diciembre, y causaron la muerte de un comandante y 14 soldados, y además dejaron heridos a otros 17. La cifra no pudo ser confirmada de manera independiente.

Tres días más tarde, dos soldados del Gobierno fueron muertos y otros cuatro resultaron heridos en enfrentamientos en un área rebelde controlada por la sexta brigada UNK.

A pesar de que este año Myanmar realizará su primera elección parlamentaria en dos décadas, sus críticos descartan la iniciativa como un complot para legitimizar y extender los 50 años de Gobierno militar.

El régimen quiere que grupos étnicos participen y su apoyo fortalecería la afirmación de la junta de que todo el país estuvo detrás de las elecciones.

Críticos también afirman que el régimen está intentando reclutar a la fuerza a combatientes rebeldes para que formen una patrulle para la frontera, la cual sería administrada por el Ejército.

Visto en Refugees United.

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