Así es la nueva bandera de Birmania: una franja amarilla, otra verde y una última roja con una gran estrella blanca en el centro. La nueva insignia se suma a los cambios con los que la Junta militar del general Than Shwe está moldeando a su antojo este paupérrimo país del Sureste Asiático. Para dejar atrás la época colonial británica, primero rebautizó a Birmania como Myanmar, luego le cambió el nombre a Rangún por Yangón y, por último, trasladó la capital a Naypyidaw, una alienante ciudad sólo para los funcionarios de los ministerios que ha sido levantada en plena jungla para aislarse del pueblo.
Por sorpresa, la Junta militar develó la nueva bandera el pasado 21 de octubre, dos semanas antes de la farsa electoral para perpetuarse en el poder. A las tres de la tarde, ordenó el cambio de insignias en todo el país, desatando nuevas especulaciones sobre tan repentina medida, que estaba contemplada por la nueva Constitución pero se llevó a cabo de forma súbita.
El régimen insiste en que los colores amarillo, verde y rojo simbolizan la solidaridad, la paz, la tranquilidad, el valor y la decisión. Pero, una vez más, parece que los astrólogos, tan populares en Birmania, han vuelto a ejercer su influencia sobre el supersticioso general Than Shwe, quien, como los antiguos reyes, se deja guiar por los auspicios que le señalan sus adivinos. Todas las circunstancias indican que la numerología se halla detrás del cambio: la extraña hora para izar la bandera (tres de la tarde), la fecha (el día 21, 2+1) y el año (2010, cuyos dígitos suman tres). Todos ellos suman nueve, un número de la suerte en varios países asiáticos y, sobre todo, en Birmania, que a finales de los 80 llegó a tener billetes con las raras denominaciones de 45 y 90 kyats, cifras divisibles por nueve. Como Than Shwe, el anterior dictador del país, el general Ne Win, también basaba en la astrología los principios de su vía birmana al socialismo.
Precisamente, la nueva bandera sustituye a la que introdujo Ne Win en 1974, que era roja con un rectángulo azul en la esquina superior izquierda donde se enmarcaba una rueda de molino rodeada por una planta de arroz y 14 estrellas que simbolizaban a los siete estados y regiones de Birmania.
La numerología, la astrología, la superstición... cualquier cosa menos el bien común del pueblo rigen la política en el dictatorial régimen birmano de los generales.
Visto en el blog de Pablo M. Díez en ABC, vía Meneame.
1 comentarios:
La nueva enseña ya está por todas partes en Rangún. Por cierto, tiene los mismos colores que la bandera rastafari...
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