Ya hemos dicho que las comparaciones son odiosas; personalmente no me gustan. Pero cuando el agravio comparativo es excesivo, toca comparar.
Y Ko htike lo tiene bien claro:- No es lo mismo un gobierno que ayuda a sus ciudadanos, que un gobierno que se queda con la ayuda de sus ciudadanos, por muy dictatoriales que ambos sean:
-No es lo mismo que te ayuden, a tener que ayudarte tú mismo:
- No es lo mismo sobrevivir a una catástrofe en China, que en Birmania:
- No es lo mismo aceptar la ayuda exterior, que creerse omnipotente y negar que existe el exterior; o el interior:
- No es lo mismo tener esperanza, que estar desesperado; o desesperanzado:
0 comentarios:
Publicar un comentario